Además de sus características organolépticas (sabor, textura, olor, color…), la cúrcuma se ha empezado a hacer famosa por su posible potencial efecto anticancerígeno, en concreto de la curcumina, un compuesto químico presente en la cúrcuma que parece ser el responsable de sus propiedades beneficiosas para la salud.
Efectos de la cúrcuma en diferentes enfermedades
Cúrcuma y enfermedades inflamatorias
En la mayoría de enfermedades crónicas como las enfermedades cardiovasculares, metabólicas, autoinmunes o neurodegenerativas, el proceso de inflamación tiene un papel muy importante, por ello el poder antiinflamatorio de la curcumina podría tener un efecto beneficioso sobre ellas, así como mejorar las cifras de colesterol sanguíneo LDL.
Cúrcuma y cáncer
Muchos son los estudios que han evaluado los efectos de la cúrcuma sobre el cáncer, entre ellos el cáncer de páncreas, próstata, mama, pulmón y cáncer colorrectal. La mayoría de estudios utilizan diferentes dosis de extracto de cúrcuma o curcumina. Algunos estudios en laboratorio indican que la curcumina puede inhibir la multiplicación de células cancerígenas, pero sin resultados concluyentes.
Cúrcuma y diabetes
Estudios en animales muestran que tras ingerir curcumina en dosis determinadas existe un efecto hipoglucemiante, es decir, que disminuye el azúcar sanguíneo. Otros estudios en humanos han demostrado la capacidad de la curcumina para disminuir la glucemia en diabéticos. Aun así, los estudios son muy escasos para poder afirmar su efectividad para toda la población.
Cúrcuma y enfermedades digestivas
La curcumina parece tener efectos antiinflamatorios que pueden mejorar sintomatología y reducción de medicación en la enfermedad de Crohn y colitis ulcerosa. Ambas patologías sufren procesos inflamatorios en el tracto digestivo. Nuevamente los estudios son muy escasos para poder otorgarles dichas propiedades.
Componentes nutricionales de la Cúrcuma
La cúrcuma destaca por su contenido en vitaminas y minerales, como los folatos, la vitamina B3, vitamina C, vitamina E, potasio, fósforo, magnesio y calcio.
Vitamina E
Esta vitamina es un potente antioxidante, se encarga de proteger al organismo de los conocidos radicales libres, sustancias que pueden dañar las células, órganos y tejidos. Además, participa en el sistema inmunitario frente al ataque de virus y bacterias, participa en la formación de los glóbulos rojos, participa en procesos celulares y en la formación de vitamina K entre muchas otras funciones.
Vitamina B3
La vitamina B3 o niacina es una vitamina hidrosoluble que participa en el funcionamiento del aparato digestivo y el sistema nervioso. Además, participa en los procesos bioquímicos del metabolismo, transformando los alimentos en energía.
Potasio
Este mineral propio de los vegetales, es indispensable para la transmisión y generación del impulso nervioso, participa en la contracción muscular, así como en el equilibrio hídrico tanto en el interior como en el exterior de la célula.
Fósforo
La función principal del fósforo es la participación de los huesos y dientes. Participa en el metabolismo de lípidos y carbohidratos y ayuda en la formación, conservación y reparación proteica de tejidos y células. Participa en la producción de ATP (molécula que ayuda a almacenar energía), en el funcionamiento renal, contracción muscular, impulso nervioso…
Magnesio
Este mineral se encarga de mantener un funcionamiento adecuado de los intestinos, músculos y nervios, también participa en la regulación de la contracción cardíaca, mejora el sistema inmunitario, y forma parte de huesos y dientes.
Folatos
Otra de las vitaminas destacadas en la cúrcuma son los folatos, también llamado ácido fólico o vitamina B9. Interviene en la producción de los glóbulos rojos, en el en el desarrollo del sistema nervioso, participa en la síntesis de material genético y en la formación de anticuerpos. Además, es importantísimo a la hora de prevenir anemias y la espina bífida en el embarazo.
En conclusión, la cúrcuma puede formar parte de nuestra cocina, es un gran potenciador del sabor, da color y aroma a nuestros platos. Ahora bien, si pensamos incluirla en nuestra dieta por sus grandes beneficios para la salud, recordemos que los estudios muestran que sus beneficios no son concluyentes. Sobre todo, si tenemos en cuenta que la cantidad de cúrcuma que vamos a tomar es una porción demasiado pequeña desde el punto de vista terapéutico.